De fiestas, más fiesta y resaca

Partía Óbila de la ciudad amurallada, con las fiestas de Santa Teresa llegando a su fin, y ponía rumbo a Zaragoza, ciudad que también está disfrutando de los últimos días de las fiestas de la Virgen del Pilar...

... visita obligada en un día que comenzaba a tener un ambiente festivo antes de llegar al pabellón Miralbueno y comenzar el calentamiento...

... y ambiente festivo en lo deportivo con el magnífico juego coral que demostró el conjunto abulense durante el primer cuarto. Los verderones estuvieron muy acertados durante el primer parcial (Young 8 puntos, Marzo y Mbamalu 5...) y eso se notó en el luminoso al final del periodo: El Olivar 15 - Óbila 28.

Al inicio del segundo cuarto Óbila alcanzaba su mayor ventaja por el momento (+16, 15-31) pero el local Pursl se sumaba a la fiesta e iniciaba la remontada local. Óbila acusaba en exceso la baja de Sebirumbi, lesionado en el primer periodo, y comenzaba a perder la guerra del rebote (fundamental en un encuentro entre dos de los equipos dominadores en este apartado). A falta de cuatro minutos para el descanso Gaffaney culminaba el arreón maño y El Olivar ya mandaba en el encuentro: 34-33. Pursl, de nuevo, parecía cambiar definitivamente el signo festivo y con un triple colocaba el 45-38 (máxima ventaja local hasta el momento) a la vez que alcanzaba la "capitanía" del juego (16 de valoración). Reaccionó Óbila en los instantes finales y se llegó al descanso con dos puntos de ventaja para El Olivar (45-43). Las espadas en alto para la segunda mitad.

Retirada al vestuario y momento para buscar alternativas. Olivar mandaba en los rebotes (14-10) y había que intentar regresar al nivel de juego del primer cuarto. Con la lesión de Sebirumbi se perdía fuerza en la pintura, circunstancia que había que compensar lo antes posible.

Se reanudó el juego y se vivieron los cinco minutos más igualados del choque. Mediado el tercer periodo el marcador señalaba un abierto 58-57. Mbamalu y Lobo mantenían el tono anotador de los verderones pero Kohs, por parte de los locales, y a pesar de haber estado "desparecido" hasta el momento, se sumaba a la fiesta con ocho puntos (dos triples incluidos) que elevaban la distancia de los maños hasta los 10 (69-59) a minuto y medio del final del periodo. En esos últimos instantes poco cambios y un resultado que comenzaba a tomar claro color local: 74-63.

El cuarto definitivo se iniciaba con un parcial de 4-0 para El Olivar que alcanzaba su máxima ventaja (+15, 78-63) y se convertía en el animador de la fiesta. Quince puntos que ya tuvo Óbila en el inicio del segundo periodo y que parecía que volvían a convertirse en punto de inflexión. Llegada la mitad del cuarto Mbamalu convertía un triple y colocaba a los verderones a siete puntos (82-75) asentando la reacción visitante y la posibilidad de remontada. No perdieron los nervios los locales y, a pesar de un nuevo triple de Marzo, volvieron a recuperar ventaja (+11) 89-78, en lo que ya parecía la sentencia del partido a falta de 2:45.
Tiempo muerto de Mangas buscando lo imposible, precipitación lógica en estas circunstancias y final del encuentro

El Olivar 93 - Óbila 80

Lo que empezó con fiestas, continuó con fiesta deportiva que se nos fue de las manos (deseando y confiando que la lesión de Sebirumbi sea leve), circunstancia que aprovecharon los rivales para dejarnos sumidos en una dolorosa resaca. A pesar de la derrota los nuestros trabajaron al máximo y se dejaron la piel en la cancha, la Marea Verde tiene el antídoto preparado para la resaca y durante la semana lo potenciará para volver a disfrutar del EQUIPO el sábado que viene...

¡¡¡ Vamos Óbila !!!